martes, 12 de mayo de 2015

Opinion: Mercedes tiraniza el mundial, Ferrari ni se le acerca

El domingo vimos una carrera aburrida, al menos así la viví yo.

La vi en diferido porque estaba de viaje a las 14, pero no me perdi nada del otro mundo. Al menos ganó Rosberg, a ver si despierta el alemán porque hasta ahora era la decepción de la parrilla. Vettel pudo darle algo de emoción al podio, pero en cuanto Hamilton y Mercedes lo pasaron la Scuderia no pudo oponer ninguna resistencia.

A eso es lo que voy. Mercedes domina de tal forma el mundial que, a mi parecer, está resultando hasta insultante para el resto de equipos. Si para Ferrari lo es, para los demás ni hablamos. Se habla en la prensa de que se esperaba mucho más de la Scuderia, que han "involucionado" una vez más el SF15 T para terminar a 45 segundos de Rosberg, cuando hace 3 GP ganaban la carrera. Lo han vuelto a hacer, por esto Fernando se fue de Ferrari.

Las flechas plateadas van a dominar lo que resta de temporada. El que no lo quiera ver perfecto, pero esa es mi opinión. Nos espera una temporada aburrida en lo que respecta a los motoristas, y algo más emocionante en el de pilotos si Nico termina de arrancar para poner en aprietos a Lewis, espero que lo haga por el bien del espectáculo.




Es cierto que la PU de Ferrari ha mejorado mucho respecto a 2014, pero no van a alcanzar a Mercedes esta temporada. Les ha servido para pasar a Williams o Red Bull, que no es poco, pero no es el objetivo de los italianos. De Renault y Red Bull ni hablamos. Menudo desastre. Ellos si que tienen un problema y muy gordo, más teniendo la misma experiencia que la competencia exceptuando a Honda. 

A los japos y McLaren poco se les puede decir o reprochar. Fue una decepción, otra más porque se esperaba que dieran un verdadero paso adelante, pero no se pueden hacer milagros en una F1 capada de entrenos, limitaciones de motores y reglas absurdas de control de presupuesto. Bravo a la FIA (entiéndase la ironia) por permitir haber convertido el mayor espectáculo del motor del mundo en un campeonato más previsible que el calor en Sevilla un 10 de agosto.  Amo la F1, pero se están cargando aquel deporte del cual me enamoré alla por el 2000 con un Schumacher montado en un V12 que te ponía los pelos de punta... 

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