Hoy la fortuna no ha estado de parte de Fernando Alonso. La salida fue buena para el piloto español, que incluso logró ponerse en segunda posición, pero la rotura repentina de su alerón trasero que inutilizó por completo el DRS de su F138 le obligó a efectuar dos paradas imprevistas en boxes, mermando muy mucho sus opciones en carrera. La prueba pasó entonces a intentar minimizar las pérdidas, aún con la desventaja que suponía tener inutilizado el DRS en el cuerpo a cuerpo contra sus rivales. Al final, el bicampeón español pudo rescatar los cuatro puntos que otorga la octava posición.
El asturiano señalaba tras la prueba: "La verdad es que todo se torció desde el principio. Seguramente hoy no era el día de atraer la suerte, porque en Malasia se podía debatir si era suerte o no suerte, pero supongo que hoy no habrá nadie que diga que no es mala suerte que el DRS se te quede bloqueado. Por tanto, intentamos recuperar durante la carrera pero bueno, hicimos una parada más que lo demás, una parada también a destiempo para repararlo y luego una lucha sin DRS en la que había que adelantar en sitios bastante difíciles. Pero bueno, era lo que tocaba hoy, luchar desde atrás, coger algún punto, octavo, séptimo, lo que sea. Y bueno, ya llegarán supongo momentos de más suerte, e intentar aprovechar en esos días", concluyó.
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