Opinión: La salida de Domenicali no ayudará a Ferrari a corto plazo

Llegó el momento que muchos aficionados de Ferrari esperaban: Stefano Domenicali ha dimitido esta mañana como jefe de la Scuderia.

El presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, ha aceptado esta mañana la dimisión con iniciativa propia del propio Domenicali. El sustituto de Stefano será Marco Mattiacci, máximo responsable de Ferrari Norteamérica, donde la marca ha obtenido unos resultados récord en lo que ha beneficios económicos se refiere. 

Pues bien, muchos aficionados (entre los cuales me hallo), estarán contentos por la decisión tomada hoy en Ferrari, pero el hecho de que se haya producido con sólo tres carreras disputadas en lo que llevamos de campeonato me preocupa, y mucho. Esto no es como el fútbol que a las primeras de cambio se cambia de entrenador. Normalmente este tipo de decisiones se hacen en la pausa invernal, para dar tiempo al equipo a preparar la próxima campaña tanto deportiva como administrativamente, pero si Domenicali ha decidido irse de Ferrari nada más empezar el Campeonato puede ser porque quizás el F14 T no tiene tanto margen de evolución como nos quieren hacer creer.

Es decir, Domenicali, viendo la tormenta que se le viene encima, ha podido abandonar el barco apenas poco después de que éste haya salido a la mar. Ojalá me equivoque, pero estos cambios con el campeonato ya comenzado lo único que aportan es desorganización, y precisamente ese no es el fuerte de Ferrari actualmente (si es que tiene alguno). A corto plazo la cosa pinta mal: primero deportivamente, porque Ferrari está a años luz de los Mercedes en rendimiento, pero a mi parecer también pinta mal administrativamente: factor fundamental en lo que respecta a la evolución del monoplaza. Repito, ojalá me equivoque, pero parece que las próximas carreras van a dar mucho de que hablar en Maranello. 

Todo parece indicar que su sucesor, Marco Mattiacci, tendrá carácter temporal, y los rumores apuntan a nombres empezando por la letra "B" en la próxima temporada: Brawn, Bergher o incluso Briatore están en las quinielas para comandar a la Scuderia en el próximo curso. Una cosa tengo clara: si el bueno de Flavio se hace con los mandos de la Scuderia, Alonso no se moverá de Ferrari.