Pese a los problemas en pretemporada, desde Red Bull esperaban luchar por cosas importantes.
Si algún equipo puntero parecía muy tocado en pretemporada ese era Red Bull. El equipo austriaco tuvo numerosos problemas de fiabilidad, debidos tanto a su propulsor Renault como al diseño tan agresivo de Adrian Newey. Pese a que todo el mundo pensaba que iban a tener un principio de campaña complicado, su jefe de equipo, Christian Horner asegura que en ningún momento llegaron a pensar que fueran a ser de los peores clasificados tras las jornadas del sábado y domingo:
"Nunca hemos creído que no fuéramos a estar en la pelea y vamos a seguir luchando tan duro como podamos para contraatacar con nuestro espíritu competitivo", reconocio a Autosport. "Sabemos que tenemos la base de un buen coche. Sabemos que tenemos problemas que resolver, sólo tenemos que trabajar duro para superarlos rápidamente, junto con los chicos de Renault. Estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo para apoyarlos. Melbourne fue la mejor oportunidad que hemos tenido realmente para trabajar en el coche con la puesta a punto y la primera oportunidad de conducir el coche en buen estado", destacó.
El director de Red Bull Racing pone como ejemplo los problemas que tuvieron en 2012 cuando finalmente terminaron ganando el campeonato: "Ha sido una pretemporada horrible para nosotros, pero si alguien es capaz de recuperar terreno rápidamente, esos somos nosotros como hicimos en el pasado. Tuvimos un comienzo de temporada difícil en 2012 después de un gran cambio de regulación en el soplado de los escapes y nos recuperamos bien de eso. El dominio en los últimos años no fue nuestra culpa. De acuerdo, hicimos un gran trabajo hasta las últimas regulaciones y tenemos algunos desafíos por delante de nosotros, pero la unidad de potencia es un cambio en el juego y nosotros hemos visto eso", finalizó.
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